Este libro podría haber sido escrito en Lisboa. La nostalgia y la decadencia pasean por sus párrafos haciéndonos notar que “Tempus fugit”, es decir, que el tiempo huye, se escapa. Cada vez soy más consciente –cosas de la edad– de que los seres humanos somos solo tiempo. Y éste envejece deprisa, como dice Antonio Tabucchi, el autor de este libro de relatos. Sin embargo, mi madre siempre me dice que no pasa el tiempo, que somos nosotros los que pasamos.
No os creáis que son historias tristes las que pueblan las páginas de El tiempo envejece deprisa: son más bien historias de gente que se paran un momento para repasar su vida, que recuerdan cómo su tiempo fue pasando al igual que un tren a toda velocidad.
Hay protagonistas que vivieron en países privados de libertad, como los que pertenecían a la antigua Unión Soviética; algunos de ellos, actores de un guión impuesto por las alturas. Marionetas sin hilos y sin voluntad.
También encontraréis a una mujer que trata de recordar cómo ha llegado al punto en el que se encuentra su vida y encuentra huecos en su existencia, lagunas de años.
Además, he descubierto una antigua canción sefardí que es el título de uno de los relatos: Yo me enamoré del aire. Ya sabemos, por lo menos en mi caso, que pocas cosas nos ponen más nostálgicos que una canción. Una música nos puede transportar a la compañía de gentes que ya no están.
La lectura de estos relatos ha despertado en mí la pregunta que siempre me ha rondado por la cabeza: ¿Por qué, si nuestro tiempo es corto, nos hacemos la vida imposible los unos a los otros? ¿Para qué atesorar tanto dinero mientras otros no pueden vivir?
La otra noche vi un programa sobre la adicción a los zapatos y no podía creer cómo algunas mujeres sonreían ante los miles de euros de su armario, con una sonrisa que decía: “Me los compro porque tú no puedes pagarlos”. No creo que vaya yo a cambiar mucho desde esta columna, pero parémonos un poco y reflexionemos. ¿De verdad estamos viviendo? El reloj no atrasa…
Quiero compartir con vosotros la canción sefardí y otra canción que habla de la necesidad de vivir el "ahora".
Ficha literaria
Título: El tiempo envejece deprisa.
Autor: Antonio Tabucchi.
Género: Relatos.
Título original: Il tempo envecchia in fretta.
Fecha de publicación: 2009.
Editorial: Anagrama.
ISBN: 978-84-339-7658-1.
No os creáis que son historias tristes las que pueblan las páginas de El tiempo envejece deprisa: son más bien historias de gente que se paran un momento para repasar su vida, que recuerdan cómo su tiempo fue pasando al igual que un tren a toda velocidad.
Hay protagonistas que vivieron en países privados de libertad, como los que pertenecían a la antigua Unión Soviética; algunos de ellos, actores de un guión impuesto por las alturas. Marionetas sin hilos y sin voluntad.
También encontraréis a una mujer que trata de recordar cómo ha llegado al punto en el que se encuentra su vida y encuentra huecos en su existencia, lagunas de años.
Además, he descubierto una antigua canción sefardí que es el título de uno de los relatos: Yo me enamoré del aire. Ya sabemos, por lo menos en mi caso, que pocas cosas nos ponen más nostálgicos que una canción. Una música nos puede transportar a la compañía de gentes que ya no están.
La lectura de estos relatos ha despertado en mí la pregunta que siempre me ha rondado por la cabeza: ¿Por qué, si nuestro tiempo es corto, nos hacemos la vida imposible los unos a los otros? ¿Para qué atesorar tanto dinero mientras otros no pueden vivir?
La otra noche vi un programa sobre la adicción a los zapatos y no podía creer cómo algunas mujeres sonreían ante los miles de euros de su armario, con una sonrisa que decía: “Me los compro porque tú no puedes pagarlos”. No creo que vaya yo a cambiar mucho desde esta columna, pero parémonos un poco y reflexionemos. ¿De verdad estamos viviendo? El reloj no atrasa…
Quiero compartir con vosotros la canción sefardí y otra canción que habla de la necesidad de vivir el "ahora".
Ficha literaria
Título: El tiempo envejece deprisa.
Autor: Antonio Tabucchi.
Género: Relatos.
Título original: Il tempo envecchia in fretta.
Fecha de publicación: 2009.
Editorial: Anagrama.
ISBN: 978-84-339-7658-1.
MARÍA JESÚS SÁNCHEZ / REDACCIÓN