FACUA Córdoba ha mostrado su disconformidad con
la multa impuesta por la Junta de Andalucía a la empresa Eventos Color
Sur SL, organizadora del cotillón que se celebró la pasada Nochevieja en
el Hotel Atalaya, y de cuyas incidencias informó en primicia Montilla Digital. Para la organización de consumidores la sanción de 35.000 euros es "ridícula" ante la gravedad de los hechos.
En este sentido, FACUA Córdoba ha lamentado a través de un comunicado de prensa que, a pesar de reconocer la propia Junta que la empresa "puso en riesgo la seguridad de las personas", tan sólo la haya sancionado con una multa mínima de 35.000 euros cuando, además de vender más 2.800 entradas para un aforo máximo de 750 personas, "existieron numerosas infracciones y problemas que también denunciaron tanto FACUA Córdoba como los propios asistentes".
"La sanción impuesta dista mucho de la cantidad que recibió la empresa por la organización del evento. Teniendo en cuenta que vendió entradas a 33, 40 y 60 euros la organizadora puedo ingresar más de 100.000 euros", sostiene la organización de consumidores, que califican de "vergüenza" la multa impuesta por la Junta pues "no deja de ser una invitación a las empresas a que vulneren los derechos de los usuarios, ya que solo se arriesgan a ser descubiertas pero su margen de beneficios apenas se ve afectado".
En este sentido, la asociación incide en que la multa impuesta por la Delegación del Gobierno de la Junta en Córdoba, que ha calificado los hechos como "muy graves", está entre las más bajas de las que se establecen en el artículo 22 de la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía –que van desde los 30.000 a los 601.000 euros–.
Por todo ello, FACUA Córdoba considera "inaceptable" este hecho, teniendo en cuenta además que los responsables de Eventos Color Sur SL están siendo investigados por este suceso en el marco del procedimiento judicial que está instruyendo el Juzgado de Primera Instancia de Instrucción de Montilla, al haber detectado "indicios relevantes de criminalidad", y en el que está personada la asociación como acusación popular.
Por último, FACUA Córdoba insta a la Junta de Andalucía a que se decida de una vez a imponer "sanciones contundentes" que disuadan a los organizadores de fiestas y eventos de vulnerar los derechos de los asistentes y poner en riesgo su integridad física sólo por conseguir un mayor beneficio económico.
Una noche de incidencias
Tal y como adelantó en primicia este periódico, la fiesta en el Hotel Atalaya no fue el único cotillón organizado por Eventos Color Sur en Andalucía el pasado 31 de diciembre en el que se registraron importantes incidencias. No en vano, más de un millar de personas se quedó sin poder celebrar la Nochevieja en Moguer, después de que el Ayuntamiento de la localidad onubense suspendiera la fiesta ante el exceso de aforo y el descontrol de la organización.
Las colas de más de una hora para poder entrar y la falta de bebidas, de hielo y de personal para atender la barra provocó el enfado de muchos asistentes que, como recogió Diario de Huelva, "optaron por tirar sillas y mesas por los suelos y entrar en la barra para apropiarse del poco alcohol que quedaba, antes incluso de que se ordenase la suspensión" de la fiesta.
Los incidentes también se dejaron notar en el Hotel Atalaya de La Rambla donde, según los testimonios aportados por numerosos testigos, se requirió la presencia de varias patrullas de la Guardia Civil y de efectivos sanitarios, que debieron atender a un joven con heridas en la cabeza por el lanzamiento de una botella, además de algunos comas etílicos.
En este sentido, FACUA Córdoba ha lamentado a través de un comunicado de prensa que, a pesar de reconocer la propia Junta que la empresa "puso en riesgo la seguridad de las personas", tan sólo la haya sancionado con una multa mínima de 35.000 euros cuando, además de vender más 2.800 entradas para un aforo máximo de 750 personas, "existieron numerosas infracciones y problemas que también denunciaron tanto FACUA Córdoba como los propios asistentes".
"La sanción impuesta dista mucho de la cantidad que recibió la empresa por la organización del evento. Teniendo en cuenta que vendió entradas a 33, 40 y 60 euros la organizadora puedo ingresar más de 100.000 euros", sostiene la organización de consumidores, que califican de "vergüenza" la multa impuesta por la Junta pues "no deja de ser una invitación a las empresas a que vulneren los derechos de los usuarios, ya que solo se arriesgan a ser descubiertas pero su margen de beneficios apenas se ve afectado".
En este sentido, la asociación incide en que la multa impuesta por la Delegación del Gobierno de la Junta en Córdoba, que ha calificado los hechos como "muy graves", está entre las más bajas de las que se establecen en el artículo 22 de la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía –que van desde los 30.000 a los 601.000 euros–.
Por todo ello, FACUA Córdoba considera "inaceptable" este hecho, teniendo en cuenta además que los responsables de Eventos Color Sur SL están siendo investigados por este suceso en el marco del procedimiento judicial que está instruyendo el Juzgado de Primera Instancia de Instrucción de Montilla, al haber detectado "indicios relevantes de criminalidad", y en el que está personada la asociación como acusación popular.
Por último, FACUA Córdoba insta a la Junta de Andalucía a que se decida de una vez a imponer "sanciones contundentes" que disuadan a los organizadores de fiestas y eventos de vulnerar los derechos de los asistentes y poner en riesgo su integridad física sólo por conseguir un mayor beneficio económico.
Una noche de incidencias
Tal y como adelantó en primicia este periódico, la fiesta en el Hotel Atalaya no fue el único cotillón organizado por Eventos Color Sur en Andalucía el pasado 31 de diciembre en el que se registraron importantes incidencias. No en vano, más de un millar de personas se quedó sin poder celebrar la Nochevieja en Moguer, después de que el Ayuntamiento de la localidad onubense suspendiera la fiesta ante el exceso de aforo y el descontrol de la organización.
Las colas de más de una hora para poder entrar y la falta de bebidas, de hielo y de personal para atender la barra provocó el enfado de muchos asistentes que, como recogió Diario de Huelva, "optaron por tirar sillas y mesas por los suelos y entrar en la barra para apropiarse del poco alcohol que quedaba, antes incluso de que se ordenase la suspensión" de la fiesta.
Los incidentes también se dejaron notar en el Hotel Atalaya de La Rambla donde, según los testimonios aportados por numerosos testigos, se requirió la presencia de varias patrullas de la Guardia Civil y de efectivos sanitarios, que debieron atender a un joven con heridas en la cabeza por el lanzamiento de una botella, además de algunos comas etílicos.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: BEATRIZ JIMÉNEZ (CEDIDA)
FOTOGRAFÍA: BEATRIZ JIMÉNEZ (CEDIDA)
