Un total de 78.850 personas recibieron algún tipo de apoyo o atención por parte del voluntariado de Cruz Roja Española en Córdoba a lo largo de 2018, un año que estuvo marcado, entre otras cosas, por la acogida extraordinaria de varios grupos de inmigrantes provenientes de las costas de Cádiz que hubo que organizar durante el pasado verano.
De esa cifra global, 70.893 fueron ciudadanos con los que se intervino de manera individual a través de alguno de los muy diversos proyectos de la entidad, mientras que los 7.957 restantes participaron en alguna de las numerosas iniciativas de educación y sensibilización impulsadas por la organización, que abarcan temáticas de distinta índole, desde salud, sexualidad y prevención de conductas violentas entre los adolescentes hasta las migraciones forzosas o los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La respuesta a las necesidades básicas de familias en situación de extrema vulnerabilidad, junto a la intervención con personas mayores, mujeres, inmigrantes y refugiados y la promoción del empleo acapararon el mayor volumen de atenciones.
"Córdoba sigue siendo una provincia solidaria y modelo de valores. La acogida a personas derivadas de costas puso de manifiesto el pasado verano el potencial humano de sus gentes, capaces de dar una respuesta ejemplar, a la altura de las especiales circunstancias", destacó la montillana Cándida Ruiz, presidenta provincial de Cruz Roja.
Fruto de esa solidaridad y entrega, la entidad pudo intervenir el pasado año con otros muchos colectivos, tal y como enumeró Ruiz. "Seguimos trabajando con ilusión con personas mayores, desempleadas, familias necesitadas, mujeres en dificultad, jóvenes, con la infancia, y con quienes se ven obligadas a dejar sus países de origen", indicó.
Y es que los servicios e iniciativas promovidos por la organización abarcan prácticamente todos los sectores de población, desde mayores hasta infancia, pasando por personas con discapacidad, inmigrantes, refugiados, drogodependientes, mujeres en dificultad social, personas afectadas de VIH/SIDA, familias con escasos recursos económicos o incluso habitantes de otras zonas del mundo necesitadas de ayuda humanitaria y de programas de cooperación al desarrollo.
Los datos recogidos en la Memoria del pasado año dan fe del esfuerzo del voluntariado de la entidad: más de 9.000 niños y niñas, adolescentes y jóvenes participaron en talleres y actividades de Cruz Roja Juventud; 3.735 ciudadanos de la provincia fueron atendidos por los servicios de Socorros y Emergencias; y más de 16.000 se formaron a través de alguno de los cursos impartidos por la organización.
Tampoco se pueden pasar por alto los proyectos de cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria apoyados por la institución en lugares como Líbano, Palestina, Perú o los campamentos de refugiados saharauis; ni las 3.583 personas con la que se llevaron a cabo actividades desde Andalucía Compromiso Digital, iniciativa impulsada por la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad y gestionada por Cruz Roja.
Por todo ello, hay que dar las gracias "al voluntariado, fuerza y motor de la Institución, por su inestimable labor, dando siempre lo mejor de sí a quienes necesitan ayuda y cariño; a socios, empresas colaboradoras y administraciones públicas, por su confianza, generosa colaboración y apoyo; y a todo el equipo técnico, por su esfuerzo y buen hacer", concluyó la presidenta provincial de la entidad.
De esa cifra global, 70.893 fueron ciudadanos con los que se intervino de manera individual a través de alguno de los muy diversos proyectos de la entidad, mientras que los 7.957 restantes participaron en alguna de las numerosas iniciativas de educación y sensibilización impulsadas por la organización, que abarcan temáticas de distinta índole, desde salud, sexualidad y prevención de conductas violentas entre los adolescentes hasta las migraciones forzosas o los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La respuesta a las necesidades básicas de familias en situación de extrema vulnerabilidad, junto a la intervención con personas mayores, mujeres, inmigrantes y refugiados y la promoción del empleo acapararon el mayor volumen de atenciones.
"Córdoba sigue siendo una provincia solidaria y modelo de valores. La acogida a personas derivadas de costas puso de manifiesto el pasado verano el potencial humano de sus gentes, capaces de dar una respuesta ejemplar, a la altura de las especiales circunstancias", destacó la montillana Cándida Ruiz, presidenta provincial de Cruz Roja.
Fruto de esa solidaridad y entrega, la entidad pudo intervenir el pasado año con otros muchos colectivos, tal y como enumeró Ruiz. "Seguimos trabajando con ilusión con personas mayores, desempleadas, familias necesitadas, mujeres en dificultad, jóvenes, con la infancia, y con quienes se ven obligadas a dejar sus países de origen", indicó.
Y es que los servicios e iniciativas promovidos por la organización abarcan prácticamente todos los sectores de población, desde mayores hasta infancia, pasando por personas con discapacidad, inmigrantes, refugiados, drogodependientes, mujeres en dificultad social, personas afectadas de VIH/SIDA, familias con escasos recursos económicos o incluso habitantes de otras zonas del mundo necesitadas de ayuda humanitaria y de programas de cooperación al desarrollo.
Los datos recogidos en la Memoria del pasado año dan fe del esfuerzo del voluntariado de la entidad: más de 9.000 niños y niñas, adolescentes y jóvenes participaron en talleres y actividades de Cruz Roja Juventud; 3.735 ciudadanos de la provincia fueron atendidos por los servicios de Socorros y Emergencias; y más de 16.000 se formaron a través de alguno de los cursos impartidos por la organización.
Tampoco se pueden pasar por alto los proyectos de cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria apoyados por la institución en lugares como Líbano, Palestina, Perú o los campamentos de refugiados saharauis; ni las 3.583 personas con la que se llevaron a cabo actividades desde Andalucía Compromiso Digital, iniciativa impulsada por la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad y gestionada por Cruz Roja.
Por todo ello, hay que dar las gracias "al voluntariado, fuerza y motor de la Institución, por su inestimable labor, dando siempre lo mejor de sí a quienes necesitan ayuda y cariño; a socios, empresas colaboradoras y administraciones públicas, por su confianza, generosa colaboración y apoyo; y a todo el equipo técnico, por su esfuerzo y buen hacer", concluyó la presidenta provincial de la entidad.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL