La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha informado al Consejo de Gobierno de la ampliación de crédito de la convocatoria 2020 de ayudas para la modernización de explotaciones agrarias, con el fin de elevar su presupuesto inicial hasta los 105 millones de euros. La dotación resultante de este incremento será el importe más alto de Andalucía en los últimos 14 años, ya que en los dos últimos períodos comunitarios (2007/2013 y 2014/2020) nunca se han abonado ayudas por un importe igual dirigidas a este mismo fin.
En concreto, el incremento que se aplicará en 2022 a la línea de ayudas para la modernización de explotaciones agrícolas y ganaderas andaluzas es de 45 millones de euros. Esta cantidad supone el 75% de los 60 millones de euros inicialmente asignados para unos incentivos que se otorgan en concurrencia competitiva y que contemplan, por un lado, fondos dirigidos a apoyar al sector agrario en general (70 millones) y, por otro lado, un respaldo específico para las fincas olivareras (35 millones).
El importe convocado el pasado año se correspondía con la totalidad del presupuesto disponible en el Programa de Desarrollo Rural vigente, pero la reprogramación realizada para incorporar fondos transitorios a las anualidades 2021 y 2022 ha permitido al Gobierno andaluz tramitar esta ampliación de recursos.
El listado provisional de beneficiarios, publicado el pasado mes de noviembre, contempla la concesión de subvenciones para 1.455 productores de todas las provincias de Andalucía que, según las previsiones de la Consejería de Agricultura, podrían elevarse hasta superar los 2.650 agricultores y ganaderos gracias al incremento presupuestario.
La importancia de estas ayudas también se constata en el hecho de que más del 46% de los beneficiarios son jóvenes agricultores y ganaderos andaluces. Para solicitar estas ayudas, es imprescindible ser titular de alguna explotación agraria ubicada en Andalucía, si bien entre los beneficiarios pueden encontrarse tanto personas físicas o jurídicas como agrupaciones de productores, comunidades de bienes u otro tipo de entidad.
Potenciar el rendimiento económico
Los incentivos, que cuentan con cofinanciación del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y aportaciones económicas de las Inversiones Territoriales Integradas (ITI) de Cádiz y Jaén, respaldan inversiones en activos físicos, materiales o inmateriales encaminadas a modernizar y potenciar el rendimiento económico de las explotaciones agrarias.
Asimismo, también apoyan medidas que persiguen avanzar, aún más si cabe, en la sostenibilidad de la actividad agrícola y ganadera a través la incorporación de nuevas tecnologías y la puesta en marcha de procesos de economía circular que mejoran la eficiencia energética de las fincas.
Concretamente, entre las actuaciones subvencionables que contemplan las bases reguladoras de esta línea de ayudas se encuentra la construcción de bienes inmuebles, la puesta en marcha de nuevas plantaciones de cultivos permanentes y las inversiones dirigidas a gestionar residuos y subproductos o a modernizar instalaciones y equipos de regadío.
Además, a través de las ayudas a la modernización de explotaciones agrarias, la Junta de Andalucía respalda también la adquisición de maquinaria y equipos, la instalación de nuevos invernaderos, la incorporación de equipos informáticos y la digitalización de la gestión empresarial.
En concreto, el incremento que se aplicará en 2022 a la línea de ayudas para la modernización de explotaciones agrícolas y ganaderas andaluzas es de 45 millones de euros. Esta cantidad supone el 75% de los 60 millones de euros inicialmente asignados para unos incentivos que se otorgan en concurrencia competitiva y que contemplan, por un lado, fondos dirigidos a apoyar al sector agrario en general (70 millones) y, por otro lado, un respaldo específico para las fincas olivareras (35 millones).
El importe convocado el pasado año se correspondía con la totalidad del presupuesto disponible en el Programa de Desarrollo Rural vigente, pero la reprogramación realizada para incorporar fondos transitorios a las anualidades 2021 y 2022 ha permitido al Gobierno andaluz tramitar esta ampliación de recursos.
El listado provisional de beneficiarios, publicado el pasado mes de noviembre, contempla la concesión de subvenciones para 1.455 productores de todas las provincias de Andalucía que, según las previsiones de la Consejería de Agricultura, podrían elevarse hasta superar los 2.650 agricultores y ganaderos gracias al incremento presupuestario.
La importancia de estas ayudas también se constata en el hecho de que más del 46% de los beneficiarios son jóvenes agricultores y ganaderos andaluces. Para solicitar estas ayudas, es imprescindible ser titular de alguna explotación agraria ubicada en Andalucía, si bien entre los beneficiarios pueden encontrarse tanto personas físicas o jurídicas como agrupaciones de productores, comunidades de bienes u otro tipo de entidad.
Potenciar el rendimiento económico
Los incentivos, que cuentan con cofinanciación del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y aportaciones económicas de las Inversiones Territoriales Integradas (ITI) de Cádiz y Jaén, respaldan inversiones en activos físicos, materiales o inmateriales encaminadas a modernizar y potenciar el rendimiento económico de las explotaciones agrarias.
Asimismo, también apoyan medidas que persiguen avanzar, aún más si cabe, en la sostenibilidad de la actividad agrícola y ganadera a través la incorporación de nuevas tecnologías y la puesta en marcha de procesos de economía circular que mejoran la eficiencia energética de las fincas.
Concretamente, entre las actuaciones subvencionables que contemplan las bases reguladoras de esta línea de ayudas se encuentra la construcción de bienes inmuebles, la puesta en marcha de nuevas plantaciones de cultivos permanentes y las inversiones dirigidas a gestionar residuos y subproductos o a modernizar instalaciones y equipos de regadío.
Además, a través de las ayudas a la modernización de explotaciones agrarias, la Junta de Andalucía respalda también la adquisición de maquinaria y equipos, la instalación de nuevos invernaderos, la incorporación de equipos informáticos y la digitalización de la gestión empresarial.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL