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Aureliano Sáinz | Las niñas y el deporte

A pesar de la insistente oposición de los que les niegan a las mujeres los derechos sociales que tenemos los hombres, lo cierto es que los avances que ellas van teniendo son imparables, ya que la ola de afirmación en la igualdad que décadas atrás comenzó se ha hecho, en gran medida, irreversible.


Y no es necesario ser un experto en historia contemporánea para darnos cuenta de que una vez que se comienzan a extender las reivindicaciones, y que de los casos particulares se pasan a las aspiraciones colectivas, esa lluvia fina que, tiempo atrás, impregnaba a quienes paseaban a cielo abierto ha terminado convirtiéndose en una lluvia intensa que acaba empapándonos a todos.

De todos modos, tenemos que ser conscientes de que los ataques que actualmente sufren algunos de esos derechos en países desarrollados (en el que el nuestro no es una excepción) nos hacen ver que esa irreversibilidad de la que hablo no es tan firme como creíamos, por lo que hay que estar alerta para no retroceder a tiempos pretéritos.

Puesto que llevo muchos años en el campo educativo, he podido comprobar de primera mano cómo se avanzaba en criterios de igualdad y que actuaciones que se consideraban específicamente masculinas, en la actualidad, es posible verlas también ejercidas por las chicas.

Como ejemplo, quisiera traer a colación uno de los trabajos que planteaba en los colegios y que he mantenido con el paso de los años. Se trataba de la propuesta “Dibuja tu deporte favorito”, ya que, aparte de conocer los niveles que los escolares tenían dentro de la Educación Plástica, según el curso en el que se encontraran, también comprobaba las preferencias de las alumnas por este tema. Hubo un momento en el que observé cómo ellas empezaban a trazar imágenes de figuras femeninas siendo las protagonistas de los deportes que elegían para sus dibujos.

No obstante, por entonces, las escenas de los dibujos más frecuentes estaban referidas al fútbol, deporte que, como bien sabemos, era y es eminentemente masculino. Bien es cierto que por aquellos años en las gradas de los estadios de fútbol también se contaba con la presencia de aficionadas de determinados clubes, en su mayoría acompañando a sus parejas masculinas. Pero que ellas pisaran el césped como protagonistas, fueran como jugadoras o para arbitrar los encuentros, se consideraba inimaginable.

Resultaba curioso que incluso las niñas, cuando dibujaban en el aula el tema que les había pedido, solían también elegir el fútbol como deporte que más les gustaba; pero las escenas eran de jugadores de algunos de los equipos más conocidos de Primera División.


Como ejemplo de lo indicado, acabamos de ver el dibujo de una chica de 12 años que representó magníficamente una escena en la que un jugador del Atlético de Madrid remata con la cabeza ante la portería de su eterno rival: el Real Madrid. Un detalle que nos hace ver que el dibujo es de hace bastantes años se encuentra en el trazado de los calzones cortos que por entonces portaban los jugadores, ya que en la actualidad son más alargados.


Las representaciones más habituales en las que la imagen femenina era la protagonista estaban referidas a los deportes tipo individual, especialmente aquellos en los que se utilizaba la raqueta. Quizás los ejemplos de grandes tenistas como eran Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez, dos de los nombres femeninos más relevantes del tenis español, ejercieran un influjo favorable en las alumnas. Es lo que nos muestra la autora del dibujo anterior, una niña de 8 años que representó el enfrentamiento imaginario entre jugadoras de España y Francia, tal como se deduce de las banderas que portan los espectadores.


Pasar de los deportes vistos por la televisión a aquellos que pudieran practicarse conllevaba a que fueran factibles para ellas, pues, lógicamente, para la mayoría de los escolares las pistas de tenis no están a su alcance. Sin embargo, hay colegios que se preocupan de que la educación física y el deporte sean accesibles sus alumnos y alumnas. Este paso conlleva que, ya más cercanos a nuestros días, pudiéramos ver que al pedirles que dibujaran su deporte favorito apareciera el tenis de mesa, como es el de la escena que acabamos de ver, en el que dos jugadoras se han enfrentado, de modo que una aparece como ganadora, al tiempo que la que ha perdido la partida, enfadada, ha arrojado la raqueta al suelo.


También los deportes olímpicos comenzaron a ser representados por las alumnas, puesto que en ellos las participantes podrían mostrar sus destrezas personales. Bien es cierto que algunas escenas que plasmaban eran el resultado de la admiración por algún deporte concreto que les gustaba especialmente. Es el caso de la chica de 11 años que sentía atraída por la gimnasia rítmica con cinta, tal como lo manifestó en este excelente dibujo que acabamos de ver, y en el que la protagonista exhibe su destreza corporal, al tiempo que es contemplada por espectadoras, todas del género femenino.


Pero los deportes olímpicos no solo eran admirados al contemplarlos en las pantallas; también podían ser practicados por las alumnas, tal como me manifestó la autora del dibujo precedente, una chica de sexto curso. Era alta, delgada y muy esbelta, por lo que se podía entender que su pasión era el salto de longitud, tal como lo expresó en el dibujo que, una vez finalizado, me entregó, al tiempo que me comentaba las razones del porqué esta era su especialidad.


Si hay un deporte de equipo que tempranamente arraigó en el ámbito femenino fue el del baloncesto. Esto lo pude comprobar por las reiteradas escenas que me dibujaban las niñas. También he de apuntar que bastantes representaciones de este deporte se debían a que en sus colegios contaban con canchas que estaban destinadas a la práctica en las horas del recreo o como actividades extraescolares.

Esta es la razón por la que he elegido este deporte como portada del artículo, en el que aparecen dos jugadoras del mismo equipo delante de la canasta. También acabamos otro dibujo que nos muestra a dos equipos femeninos enfrentados, de modo que una de las jugadoras se encuentra preparándose para lanzar un tiro libre.


Para cerrar, quisiera indicar que el salto más espectacular que se ha producido recientemente dentro de los deportes es el del fútbol femenino, que empieza a tener un claro reconocimiento, al equipararse en derechos con el tradicional fútbol practicado por los hombres. Pero, de momento, no tengo dibujos de chicas que me lo hayan representado. Esta es la razón por la que cierro con otro excelente dibujo de una alumna de 12 años en el que nos muestra un encuentro de baloncesto y en el que aparecen enfrentadas dos selecciones nacionales, siendo una de ellas la de España.

AURELIANO SÁINZ
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