Casi 3.000 personas migrantes han sido atendidas a lo largo de este año en alguno de los diversos centros, oficinas y servicios que Cruz Roja Española tiene en funcionamiento en la provincia de Córdoba para prestar ayuda a este grupo de población. De esa cifra global de 2.961 personas, cerca de 500 se han alojado en los centros de acogida de Cruz Roja en Baena, Puente Genil y la capital, donde llegaron derivadas de las costas, en el marco del programa de atención humanitaria que financia el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Asimismo, Cruz Roja ha apoyado a más de 1.600 personas a través del proyecto Integración de inmigrantes –subvencionado por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía–, con el que el voluntariado de la entidad ofrece asesoramiento sobre recursos y apoyo jurídico, psicológico, laboral, sanitario o en materia de vivienda.
En este sentido, hay que destacar también los distintos cursos que la organización ofrece dentro de su Programa de Atención al Inmigrante, entre los que se encuentran las clases de alfabetización y de castellano o talleres sobre temáticas diversas.
Otros servicios que Cruz Roja ofrece a la población inmigrante son el acompañamiento y apoyo en gestiones de diversa índole, la derivación a otras áreas de la institución –como el Plan de Empleo o Inclusión, para el reparto de alimentos– u otros organismos sociales y la mediación intercultural.
Pero al margen de esos centros específicos, personal técnico y voluntario de la organización se ha desplazado –también con financiación de la Junta de Andalucía– a asentamientos de inmigrantes ubicados tanto en la capital como en diversos puntos de la provincia para prestar asistencia sociosanitaria y acercar a los recursos sociales normalizados a más de 500 personas.
A todo esto hay que sumar la labor que Cruz Roja desarrolla en el marco del proyecto de acogida e integración de personas solicitantes de y/o beneficiarias de protección internacional, que financia el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Sólo en la provincia de Córdoba, la institución humanitaria ha atendido a lo largo de este año que ahora finaliza a 247 personas refugiadas o solicitantes de asilo, entre las que se encuentran alojadas en centros y las que ya están en pisos de alquiler.
Por edades, las franjas mayoritarias son las comprendidas entre los 18 y 34 años y, después, la que abarca entre los 35 y los 49; por sexos, son mayoría los hombres; y por nacionalidades, predominan la rumana y marroquí en los asentamientos, y otras como Colombia, Mali, Gambia o Senegal en los centros y oficinas. Aunque el personal de la entidad ha intervenido durante el año con personas de medio centenar de nacionalidades diferentes.
Cruz Roja señala que "aun son muchos los falsos mitos y prejuicios que sigue sufriendo este grupo de población y que suponen un obstáculo para su integración sociolaboral" y reitera asimismo su "esfuerzo incansable para salvar vidas, reducir riesgos y brindar acceso a servicios esenciales", al tiempo que recuerda que "los migrantes no caminan solos en sus viajes, ya que contarán en todo el mundo con la red internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja para apoyarlos".
En efecto, el enfoque del Movimiento Internacional de la Cruz Roja hacia la migración es estrictamente humanitario y se centra en las necesidades y vulnerabilidades de los migrantes y, como resaltan desde la entidad humanitaria, "no busca alentar, desalentar o prevenir la migración".
Asimismo, Cruz Roja ha apoyado a más de 1.600 personas a través del proyecto Integración de inmigrantes –subvencionado por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía–, con el que el voluntariado de la entidad ofrece asesoramiento sobre recursos y apoyo jurídico, psicológico, laboral, sanitario o en materia de vivienda.
En este sentido, hay que destacar también los distintos cursos que la organización ofrece dentro de su Programa de Atención al Inmigrante, entre los que se encuentran las clases de alfabetización y de castellano o talleres sobre temáticas diversas.
Otros servicios que Cruz Roja ofrece a la población inmigrante son el acompañamiento y apoyo en gestiones de diversa índole, la derivación a otras áreas de la institución –como el Plan de Empleo o Inclusión, para el reparto de alimentos– u otros organismos sociales y la mediación intercultural.
Pero al margen de esos centros específicos, personal técnico y voluntario de la organización se ha desplazado –también con financiación de la Junta de Andalucía– a asentamientos de inmigrantes ubicados tanto en la capital como en diversos puntos de la provincia para prestar asistencia sociosanitaria y acercar a los recursos sociales normalizados a más de 500 personas.
A todo esto hay que sumar la labor que Cruz Roja desarrolla en el marco del proyecto de acogida e integración de personas solicitantes de y/o beneficiarias de protección internacional, que financia el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Sólo en la provincia de Córdoba, la institución humanitaria ha atendido a lo largo de este año que ahora finaliza a 247 personas refugiadas o solicitantes de asilo, entre las que se encuentran alojadas en centros y las que ya están en pisos de alquiler.
Por edades, las franjas mayoritarias son las comprendidas entre los 18 y 34 años y, después, la que abarca entre los 35 y los 49; por sexos, son mayoría los hombres; y por nacionalidades, predominan la rumana y marroquí en los asentamientos, y otras como Colombia, Mali, Gambia o Senegal en los centros y oficinas. Aunque el personal de la entidad ha intervenido durante el año con personas de medio centenar de nacionalidades diferentes.
Cruz Roja señala que "aun son muchos los falsos mitos y prejuicios que sigue sufriendo este grupo de población y que suponen un obstáculo para su integración sociolaboral" y reitera asimismo su "esfuerzo incansable para salvar vidas, reducir riesgos y brindar acceso a servicios esenciales", al tiempo que recuerda que "los migrantes no caminan solos en sus viajes, ya que contarán en todo el mundo con la red internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja para apoyarlos".
En efecto, el enfoque del Movimiento Internacional de la Cruz Roja hacia la migración es estrictamente humanitario y se centra en las necesidades y vulnerabilidades de los migrantes y, como resaltan desde la entidad humanitaria, "no busca alentar, desalentar o prevenir la migración".
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: CRUZ ROJA ESPAÑOLA
FOTOGRAFÍA: CRUZ ROJA ESPAÑOLA
